Se puede decir más alto pero no más claro; descargarse música de Internet y compartirla con otros usuarios no es delito si no hay ánimo de obtener un beneficio comercial.
La juez Paz Aldecoa sentenció hace un par de años que si no hay ánimo de lucro, las descargas en Internet no constituyen "una infracción merecedora de sanción penal". Ahora la Audencia de Cantabria ha confirmado la sentencia.
¿Podrían entonces retirar los Ministerios y las Sociedades de Gestión las carísimas campañas que aparecen, por ejemplo, en todos las películas al inicio y que obligatoriamente tienes que "tragarte" ya que no parece ajustarse a realidad e invertir ese dinero en que la gente pueda acceder a la cultura como reza nuestra Constitución?
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